Desde hace más de cinco siglos el trébol de tres hojas ha sido el símbolo y el blasón de la familia Nishimura
Es una planta común, que brota espontáneamente y se propaga rápidamente. En las guerras internas del Japón, muchas veces las batallas arrasaban los campos y los agricultores perdían sus plantaciones. Sin embargo, el trébol luego brotaba.
Por eso, él es considerado por la familia Nishimura un símbolo de esperanza, renovación y perseverancia. Es la señal de la tierra de que los momentos difíciles pasan y que la vida siempre renace. Así, también se ha tornado el símbolo de Jacto. Durante la existencia de nuestra Empresa, en el trabajo, en los proyectos, en el éxito y en los momentos de dificultades, el trébol siempre nos recuerda el ejemplo de nuestro fundador, su lucha diaria por una vida mejor, su perseverancia y los sólidos valores que nos transmitió.