RESPONSABILIDAD SOCIAL
Jacto entiende que la empresa es parte de un organismo mayor y cuando se trabaja para el crecimiento de la sociedad, también se crece. Por eso, ella busca dialogar con las comunidades donde está presente por medio de acciones en dos áreas prioritarias:
Educación y Familia.
La actuación social de Jacto en el área educacional es conducida por la Fundación Shunji Nishimura de Tecnología, creada en 16 de noviembre de 1979 por el fundador de la empresa. A los 70 años, tras construir una de las mayores fábricas de máquinas agrícolas del mundo, y cuando todos creían que ya había hecho todo lo que podía, Nishimura comenzó una nueva misión: la de agradecerle al país que lo había recibido cuando joven. “Todo lo que tengo se lo debo al Brasil. Yo nada sería si estuviera en otro país. El Brasil es generoso; siempre me ha dado más que lo que mi trabajo merece. Por eso, necesito devolver un poco de lo mucho que he recibido de este país” él siempre decía.
Creó escuelas y consolidó un legado que hoy tiene un colegio de enseñanza infantil y básica, una escuela técnica del Senai (Serviço Nacional de Aprendizagem Industrial) y una Fatec (Faculdade de Tecnologia) con cursos inéditos dirigidos al agronegocio.
La actuación social de Jacto también está presente en el apoyo dado al crecimiento personal y profesional de los colaboradores, en el bienestar de sus familias y en las actividades de fortalecimiento de iniciativas de la comunidad.
COLeGIO AGRÍCOLA
El primer proyecto de la Fundación Shunji Nishimura de Tecnología fue la creación de la Escuela Técnica Agrícola de Pompeia, inaugurada en 1982. El fundador de Jacto idealizó una escuela donde los hijos de agricultores pudieran aprender la teoría en la clase y pudieran probar en el campo la práctica del cultivo, de la creación de animales y el uso de máquinas y equipos agrícolas. El objetivo era mejorar la renta y la vida de las familias en el campo.
En esa época la empresa ya ofrecía en la fábrica cursos rápidos de mecanización agrícola. La escuela amplió el alcance y disminuyó la distancia entre los ingenieros agrónomos y el gran contingente de trabajadores rurales con poco o ningún estudio.
La Escuela Agrícola fue instalada en una hacienda de casi 85 hectáreas. Los alumnos estudiaban y vivían en el local y fue así hasta 2007, cuando el régimen de internado acabó. De 1982 a 2007 se recibieron 797 técnicos agrícolas.
En 2008 el curso de técnico agrícola deja de comprender toda la enseñanza secundaria, con cuatro años, y pasa a ser de profesionalización, con duración de tres semestres y con énfasis en la mecanización agrícola. Son creados dos nuevos curtos técnicos, de mecánica y de electrotécnica. El Colegio Agrícola funcionó hasta 2009.
Educación INFANTIL y básica
Después de fundar la Escuela Técnica Agrícola para los jóvenes hijos de agricultores, en 1982 el fundador de Jacto creó también una escuela para la primera infancia, el Colegio Shunji Nishimira. La escuela comenzó a funcionar en 1988 y actualmente atiende niños desde la educación infantil hasta el 9º año de la educación básica.
Nishimura creía que la formación de una persona debe comenzar desde la primera infancia en un ambiente motivador y participativo, con responsabilidad y disciplina. La propuesta de la escuela busca el desarrollo de todas las potencialidades de los alumnos, con actividades complementares en las áreas de arte, deportes y robótica.
La Fundación Shunji Nishimura de Tecnología construyó las instalaciones del colegio y costea todos los gastos para su mantenimiento.
ESCueLA SENAI SHUNJI NISHIMURA
La Fundación Shunji Nishimura de Tecnología actúa también en la enseñanza secundaria y tecnológica en conjunto con el Senai (Serviço Nacional de Aprendizagem Industrial). La Escuela Senai Shunji Nishimura comenzó a funcionar el 3 de agosto de 2009 con los cursos de Electro Electrónica y Mecánica, que se ofrecían en la Escuela Agrícola.
La Fundación cedió las instalaciones, con 1.478 m2, y es responsable por todos los gastos con el mantenimiento de la estructura, incluyendo limpieza, seguridad, mobiliario, gimnasio de deportes y empleados de apoyo.
La escuela Senai fue una evolución a partir de la Escola Profissionalizante Chieko Nishimura, creada en 2005 para ofrecer cursos gratis de iniciación profesional en el área de mecánica de maquinado en el programa Menor Aprendiz y formar mano de obra calificada para la empresa.
Actualmente la unidad ofrece cursos técnicos con habilitaciones en Electro Electrónica y Mecánica y cursos de aprendizaje, calificación, recalificación, perfeccionamiento o especialización en las áreas de automación, electro electrónica, gestión, logística, metalmecánica, metalurgia, seguridad y tecnología de la información.
La unidad también ofrece un curso de enseñanza secundaria, experiencia educacional inédita para el Senai porque la institución no actúa en la enseñanza secundaria regular. Por su carácter pionero y por su metodología innovadora, el curso ha atraído visitas de educadores de todo el país, principalmente de unidades de la red de enseñanza del Sistema S, como Sesi y Senai.
Los cursos de formación inicial y continuada también pueden ser estructurados a medida para atender demandas específicas de las empresas de la región.
FACULTAD DE TECNOLOGÍA
En 2010 las instalaciones del Colegio Agrícola pasaron a abrigar una unidad de la Fatec (Facultad de Tecnología), red de enseñanza superior pública y gratuita mantenida por el Gobierno del Estado de São Paulo, con un curso inédito en el país: Mecanización en Agricultura de Precisión. En 2017 la Facultad inició el curso de Big Data en el Agronegocio, también inédito en el Brasil y en la América Latina. El curso de Mecanización ofrece 80 plazas por semestre y el Big Data, 40 plazas.
Por el convenio firmado entre la Fundación Shunji Nishimura de Tecnología y el Centro Paula Souza, administrador de la red Fatec, la Fundación es responsable por todos los gastos de mantenimiento de las instalaciones y por providenciar los equipos y máquinas necesarios para el aprendizaje. Para eso la Fundación tiene una asociación con las principales marcas presentes en el país, entre ellas sus competidores, para la cesión de equipos y maquinaria agrícola para estudio y uso en las clases. El 21 de abril de 2012, por decreto del gobierno del Estado de São Paulo, la Fatec Pompeia pasa a tener el nombre del fundador de Jacto, Shuji Nishimura. Homenaje a quien tanto se preocupó con el campo y con la formación de las personas.
LABORATORIO DE SUELOS
La Fundación Shunji Nishimura de Tecnología mantiene también un laboratorio de análisis agronómico, creado en 1985, para prestarle servicios al agricultor en análisis químico de suelos, para la determinación de la fertilidad y el análisis químico de tejidos vegetales.
Actualmente el laboratorio atiende agricultores de todo el país, principalmente de los estados de São Paulo, Minas Gerais, Mato Grosso e Mato Grosso do Sul. También es usado para clases prácticas, para prácticas y análisis experimentales de alumnos y profesores del curso de Mecanización en Agricultura de Precisión de la Fatec Shunji Nishimura.
APOYO A ENTIDADES DE LA COMUNIDAD Y AL VOLUNTARIADO
La actuación social de Jacto en la comunidad también se da por medio del apoyo a iniciativas que promueven la calidad de vida.
A lo largo de su existencia la empresa ha colaborado con donaciones para el mantenimiento del Hospital Santa Casa de Pompeia y de entidades sociales que desarrollan actividades en las áreas de arte, recreación, deportes y salud.
Jacto también actúa para fortalecer las iniciativas de la propia comunidad por medio del programa Voluntariado. Él surgió en 2008 dentro de la empresa para apoyar iniciativas sociales de los colaboradores y de sus familiares dirigidas a la comunidad. Ganó alcance y actuación también fuera de la empresa. Cualquier persona que desee actuar en beneficio de la comunidad lleva la idea para el programa y recibe orientación y apoyo para poner la idea en práctica.
CRECIMIENTO PERSONAL DE LOS COLABORADORES Y FAMILIAS
La actuación social de Jacto también acontece dentro de la empresa en iniciativas de apoyo al desarrollo personal y familiar de los colaboradores, y va mucho más allá de lo que determina la legislación laboral.
La empresa ofrece apoyo financiero para que los empleados puedan estudiar en la universidad, frecuentar cursos de especialización y de postgrado, y así crecer en la carrera. En 2016, 157 empleados recibieron apoyo para su formación superior, 46 para cursos de especialización y 3 para cursos de maestría.
Internamente es desarrollado para el área de mecánica el Curso de Perfeccionamiento Profesional. Para el área de gerencia, desde 2002 Jacto ofrece un programa de MBA (Master Business Administration) y también programas de perfeccionamiento con foco en competencias de gerencia específicas, de capacitación en ventas y marketing y para la gestión de producción.
Los colaboradores y sus familias cuentan también con el Club Jacto, espacio de ocio y recreación con más de siete mil metros cuadrados, con refectorio, canchas, gimnasio e instalaciones para fiestas y confraternizaciones. La estructura es mantenida por la empresa, incluso, con empleados de apoyo como nutricionistas, instructores, personal de limpieza y seguridad.
La empresa también desarrolla iniciativas para el fortalecimiento familiar de los colaboradores con cursos en las áreas de relaciones, creación de hijos, educación financiera, prevención al uso de drogas y fortalecimiento de hábitos y actitudes de liderazgo. En 2016 el programa ofreció 1.374 plazas en 18 cursos.